Hoy mismo, ha muerto Agnès Varda, probablemente la directora, autora, revolucionaria y mejor cineasta femenina de la historia del cine. Su fallecimiento es un hecho desolador, casi de tanta importancia como las muertes de Ingmar, Bergman, Michelangelo Antonioni,Ermano Olmi o Theo Angelopoulos. La conocí en rl extinto Festival CineFrancia de Zaragoza y en el de Hussca. Era una mujer adusta, enérgica que trabajó hasta casi el último día de su vida, largo tiempo esposa de Jacues Démy que nunca alcanzó la categoría artística de su mujer. En el futuro habrá que plantearse seriamente un ciclo Agnès Varda. Cuando hay tantos de actores, actrices y directores/as que no le llegan artñisticamente ni al polvo que dejaban sus zaparos a esta peripatética infatigable.
Agnès Varda, cuyo nombre real es Arlette Varda, nació el 30 de mayo de 1928 en Ixelles (Bélgica) de padre griego y madre francesa. Ella creció en Sète, donde su familia se refugió en 1940 y luego fue a París para estudiar fotografía.
En 1949, ella acompaña al director Jean Vilar y se da a conocer fotografiando la compañía del Teatro Nacional de la que se convierte en la fotógrafa oficial.
Filmó su primera película en 1954: "La Pointe courte", con dos actores del TNP, Philippe Noiret y Silvia Monfort.
En 1961, dirigió "Cléo de 5 a 7", que obtuvo un verdadero éxito y selló su destino como cineasta. En los años 70, fue a Los Ángeles varias veces y filmó dos documentales. Agnès Varda es una cineasta ecléctica a la que le gusta mezclar géneros de ficción y documental, largometrajes y formatos de cortometrajes. En 1985, ganó el León de oro en Venecia por su película "Sans toit ni loi".
A la muerte de su esposo Jacques Demy en 1990, ella filmó una película homenaje "Jacquot de Nantes". Luego, en 2000,la cineasta revive el éxito del público con un documental "Las espigadoras y la espigadora". Desde 2006, Agnès Varda también se había embarcado en la actividad de artistas visuales ofreciendo instalaciones en diferentes exposiciones de arte contemporáneo.
En 2008, lanzó un largometraje de autorretrato "Les Plages d'Agnès", que recibió el César al mejor documental. En el Festival de Cine de Cannes de 2015, se le otorgó la Palma de Honor. Y a finales de 2017, recibe también un Oscar de honor. Es la primera mujer (directora) en la historia del cine mundial en tener tal reconocimiento. Descanse en paz en el cielo de Lumiére esta gran mujer feminista pero no radical. El cine está de luto. Francia está de luto, como ha declarado su actual ministro de Cultura.
Agnès Varda, cuyo nombre real es Arlette Varda, nació el 30 de mayo de 1928 en Ixelles (Bélgica) de padre griego y madre francesa. Ella creció en Sète, donde su familia se refugió en 1940 y luego fue a París para estudiar fotografía.
En 1949, ella acompaña al director Jean Vilar y se da a conocer fotografiando la compañía del Teatro Nacional de la que se convierte en la fotógrafa oficial.
Filmó su primera película en 1954: "La Pointe courte", con dos actores del TNP, Philippe Noiret y Silvia Monfort.
En 1961, dirigió "Cléo de 5 a 7", que obtuvo un verdadero éxito y selló su destino como cineasta. En los años 70, fue a Los Ángeles varias veces y filmó dos documentales. Agnès Varda es una cineasta ecléctica a la que le gusta mezclar géneros de ficción y documental, largometrajes y formatos de cortometrajes. En 1985, ganó el León de oro en Venecia por su película "Sans toit ni loi".
A la muerte de su esposo Jacques Demy en 1990, ella filmó una película homenaje "Jacquot de Nantes". Luego, en 2000,la cineasta revive el éxito del público con un documental "Las espigadoras y la espigadora". Desde 2006, Agnès Varda también se había embarcado en la actividad de artistas visuales ofreciendo instalaciones en diferentes exposiciones de arte contemporáneo.
En 2008, lanzó un largometraje de autorretrato "Les Plages d'Agnès", que recibió el César al mejor documental. En el Festival de Cine de Cannes de 2015, se le otorgó la Palma de Honor. Y a finales de 2017, recibe también un Oscar de honor. Es la primera mujer (directora) en la historia del cine mundial en tener tal reconocimiento. Descanse en paz en el cielo de Lumiére esta gran mujer feminista pero no radical. El cine está de luto. Francia está de luto, como ha declarado su actual ministro de Cultura.
